lunes, 27 de marzo de 2017

INFERENCIAS


Encuentra las inferencias e implícitas de las frases de Albert Einstein.   


FRASE
INFERENCIA EXPLICITA
INFERENCIA IMPLECITA


“El aprendizaje es experiencia, todo lo demás es información.”

Para obtener una información  
siempre tenemos que basarnos en las experiencias.  
Tú fabricas tu conocimiento a través de la experiencia que vayas adquiriendo día a día y formando un conocimiento mucho mejor acerca de alguna situación.
“La educación es lo que nos queda después de olvidar lo que se ha aprendido en la escuela.”
Lo aprendido académicamente se olvida luego de la jornada.
Que lo aprendido académicamente al pasar los años se olvida, al cruzar de un curso a otro.
“La vida se hace peligrosa no por las personas que hacen el mal, sino por las que se sientan a ver lo que pasa.”
La vida cada vez aumenta su grado de peligrosidad, pero en nosotros esta ese cambio porque si no hacemos nada, nadie lo hará por nosotros.
El mal no lo hacen las personas malas, sino las personas que no toman cartas en el asunto para mejorar la situación en la que se encuentran.
“Si una idea no es absurda al principio, entonces no merece la pena.”
Una idea no debe ser siempre lógica para poderla escuchar.
Las ideas para que sean exitosas y fructíferas deben salirse de lo común e ir en busca de algo nuevo e innovador para la sociedad.
  

domingo, 5 de marzo de 2017

Rubén Darío

Nació en Metapa, Nicaragua, en el año 1867. Su verdadero nombre era Félix Rubén García Sarmiento. Fue periodista y diplomático. Hasta 1898 vivió, publicó y actuó en Chile, Centroamérica y la Argentina. En 1898 viajó a España, y vivió en Francia y otros países de Europa.Murió en León, Nicaragua, en 1916. Escribió prosa y poesía. Entre toda su producción se destacan tres obras que ayudan a comprender la evolución del Modernismo: Azul, Prosas profanas y Cantos de vida y esperanza. Los raros, en prosa, y El Canto Errante son otras de sus obras.
        Azul (1888): fue su primera obra importante. Publicada en Valparaíso, está constituida por relatos breves y algunos poemas. Significó para su autor el reconocimiento en América y en España. Sus rasgos son: sensualidad, erotismo y musicalidad. En los sonetos que cierran la obra, Darío revela sus preferencias y su cosmopolitismo. v Prosas profanas: fue publicado en Buenos Aires, en 1896. Las variaciones temáticas y las audacias métricas, son tantas que provocaron en América y en España grandes polémicas. Predomina el tema erótico, envuelto en un arte cromático y perfecto. v Cantos de vida y esperanza (1903): Los temas del libro son, entre otros: el paso del tiempo, la misión del poeta, la búsqueda de la fe, la preocupación por el futuro de América, etc. El libro termina con una expresión de temor y duda sobre el misterio de la vida. De contenido diferente, este volumen presenta el mismo cuidado formal y la notable variedad de metros y riqueza de lenguaje que caracterizan al gran poeta. 
Al valor poético intrínseco de esa segunda etapa, más perdurable que el de la primera, hay que sumar el papel de Rubén Darío como núcleo originario y aglutinador de todo un movimiento, el Modernismo, que marcó un hito en la historia de la literatura: tras seguir sumisamente durante tres siglos los rumbos de las letras europeas, nace en América una corriente literaria propia cuya influencia pasará incluso a la metrópoli. Conseguida a principios del XIX la independencia política, Latinoamérica lograba, a finales del mismo siglo, la independencia literaria.   

Durante su primeros años estudió con los jesuitas, a los que dedicó algún poema cargado de invectivas, aludiendo a sus "sotanas carcomidas" y motejándolos de "endriagos"; pero en esa etapa de juventud no sólo cultivó la ironía: tan temprana como su poesía influida por Bécquer y por Victor Hugo fue su vocación de eterno enamorado. Según propia confesión en la Autobiografía, una maestra de las primeras letras le impuso un severo castigo cuando lo sorprendió "en compañía de una precoz chicuela, iniciando indoctos e imposibles Dafnis y Cloe, y según el verso de Góngora, las bellaquerías detrás de la puerta".
Antes de cumplir quince años, cuando los designios de su corazón se orientaron irresistiblemente hacia la esbelta muchacha de ojos verdes llamada Rosario Emelina Murillo, en el catálogo de sus pasiones había anotado a una "lejana prima, rubia, bastante bella", tal vez Isabel Swan, y a la trapecista Hortensia Buislay. Ninguna de ellas, sin embargo, le procuraría tantos quebraderos de cabeza como Rosario; y como manifestara enseguida a la musa de su mediocre novela sentimental Emelina sus deseos de contraer inmediato matrimonio, sus amigos y parientes conspiraron para que abandonara la ciudad y terminara de crecer sin incurrir en irreflexivas precipitaciones.
En agosto de 1882 se encontraba en El Salvador, y allí fue recibido por el presidente Zaldívar, sobre el cual anota halagado en su Autobiografía: "El presidente fue gentilísimo y me habló de mis versos y me ofreció su protección; mas cuando me preguntó qué es lo que yo deseaba, contesté con estas exactas e inolvidables palabras que hicieron sonreír al varón de poder: "Quiero tener una buena posición social".
En este elocuente episodio, Rubén expresa sin tapujos sus ambiciones burguesas, que vería dolorosamente frustradas y por cuya causa habría de sufrir todavía más insidiosamente en su ulterior etapa chilena. En Chile conoció también al presidente suicida Balmaceda y trabó amistad con su hijo, Pedro Balmaceda Toro, así como con el aristocrático círculo de allegados de éste; sin embargo, para poder vestir decentemente, se alimentaba en secreto de "arenques y cerveza", y a sus opulentos contertulios no se les ocultaba su mísera condición.



 JOAQUI GALLELOS LARA
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Joaquín José Enrique de las Mercedes Gallegos Lara (Guayaquil, 9 de abril de 1909 – ibídem, 16 de noviembre de 1947) fue un novelista y ensayista ecuatoriano.
Nació en Guayaquil en medio de una familia pobre.Fue militante del Partido Comunista del Ecuador (PCE) hasta su muerte.
Contrajo matrimonio, en 1934, con la escritora Nela Martínez Espinosa, habiéndose divorciado poco tiempo después.
Escribió apenas un puñado de cuentos que se publicaron en la colección "Los que se van" junto con Enrique Gil Gilbert y Demetrio Aguilera Malta.
Después de su muerte se añadieron unos pocos cuentos más que no habían sido publicados, entre ellos destaca "La última erranza" que narra la historia del ajusticiamiento absurdo de un judío en las montañas de Los Andes a manos de un grupo de católicos supersticiosos.
En 1946 publicó la novela "Las cruces sobre el agua". Esta novela es un retrato de la ciudad de Guayaquil a comienzos del siglo 20; el crecimiento y la evolución de los personajes principales llegará a ponerlos en medio de la matanza de obreros "Confederación de Trabajadores del Ecuador" ocurrida el 15 de noviembre de 1922 y que según varias fuentes es, proporcionalmente la mayor matanza de obreros en el mundo, siendo este el Primer Baño de Sangre de la Clase Obrera Ecuatoriana.
Escribió también parcialmente otras dos novelas que han permanecido inéditas: Los guandos y La bruja hasta 1982 en que Nela Martínez quien fuera compañera del autor, completó y publicó la novela "Los Guandos" que fue publicada por la Editorial El Conejo en Ecuador. "La bruja" sigue esperando ser publicada.
Tenía las piernas atrofiadas hasta el extremo de no poder caminar, y sin embargo luchó como militante comunista e intelectual, llegando incluso al extremo de participar en choques callejeros y barricadas, con la ayuda de Juan Alberto Falcón Sandoval, un mulato, que además de ser su empleado doméstico era su amigo, quien le prestaba sus fuertes hombros y le servía de piernas.
Se dio a conocer en 1930 con el volumen de cuentos Los que se van, junto a Demetrio Aguilera Malta y Enrique Gil Gilbert.
Formó parte del "Grupo de Guayaquil" que, además de ser integrado por Demetrio Aguilera Malta, Enrique Gil Gilbert y él, incluyó a Alfredo Pareja Diezcanseco y a José de la Cuadra, dentro del realismo social ecuatoriano, que es hasta hoy el movimiento literario más importante que ha tenido el Ecuador.
Gallegos Lara mantuvo una activa participación política en las filas de la izquierda.
Junto con sus compañeros del "Grupo de Guayaquil", Gallegos Lara transformó la narrativa ecuatoriana y proyectó la literatura del Ecuador al mundo por medio de estampas tremendas de violencia verbal y física; además fue característica la reproducción fonética del habla montuvia. Los cuentos de Gallegos Lara combinan trágicamente una violencia inocente y premoderna con la fatalidad de una especie humana que se busca a tientas. De entre sus cuentos cabe destacar: "El guaraguao" y "Era la mama".
En 1947, poco antes de su muerte publicó La última erranza (cuentos).
En 1952 aparece su ensayo Biografía del pueblo indio (terminado en 1936) y en 1956 un volumen de sus Cuentos.

Muerte

En los primeros meses de 1947, Joaquín Gallegos Lara se sintió gravemente enfermo como consecuencia de una fístula rebelde a varios tratamientos. Y parientes, médicos, camaradas y amigos trataron de curarlo.
Su tío materno Dr. Julián Lara Calderón quiso llevarlo a los Estados Unidos a tratarlo, negándole el Consulado la visa para que viajara. Entonces fueron a Lima-Perú, donde lo desahuciaron, regresando a morir en Guayaquil.
Falleció el Domingo 16 de noviembre de 1947, a la una de la tarde, en su domicilio de Eloy Alfaro y Manabí.

Obras

  • Poema: Despedida del hogar (1926)
  • Poema: Bandera roja (1934)
  • Romance de la rural (1937)
  • Poemario: Audiciones ecuatoriales
  • Los que se van
  • Poema: Film ferroviario (1937)
  • Las cruces sobre el agua (1946)




José de la Cuadra

(Guayaquil, 1903-1941) Escritor ecuatoriano cuyos cuentos figuran entre los más importantes de la narrativa de su país. Formó parte del Grupo de Guayaquil o Grupo de los Cinco, acaso el más significativo movimiento del siglo XX para la evolución de la prosa en Ecuador. 

Cursó los estudios de derecho y fue profesor de la Universidad en su ciudad natal; ocupó luego un alto cargo en la administración pública (1939). Sus ideas socialistas lo inclinaron hacia una literatura de fondo social, de realismo dramático, en estilo cuidado y musicalmente vigoroso.
En la narración breve se encuentran sus mejores logros; uno de ellos es Banda del pueblo, incluido en su colección Horno (1932). Otros libros suyos de cuentos son Repisas (1931), El amor que dormía (1930) y Guásinton: historia de un lagarto montuvio (1938). En la recopilación El amor que dormía reunió cuentos publicados ya anteriormente: el que da título al libro (1926), Madrecita falsa (1923), La vuelta de la locura (1926), Incomprensión (1926) y El maestro de escuela (1929). 

Valoración de su obra



Podría considerarse a José de la Cuadra como el mejor exponente del realismo mágico del Ecuador y el primero de Latinoamérica, en especial por sus obras sobre la temática montubia, es decir la relativa a la vida del campesino costeño, muy distinta a la del indígena serrano. La mejor obra que expone ello es "Los Sangurimas", obra en la que relata la vida de una familia costeña, cuya existencia gira alrededor de su patriarca Nicasio Sangurima, hombre centenario, rodeado de misterio, del que se cuentan terribles y demoníacas leyendas, cada una más sangrienta que la anterior.
Son notables también muchos de sus cuentos, como Guasinton, la Tigra, Chichería, el Fin de la Teresita, etc. Resalta entre ellos la oda a la vida y captura del lagarto Guasinton y los deseos de alcanzar un mejor nivel de vida del cuento "Chicheria".
Su obra "La Tigra" fue llevada al cine y "Los Sangurimas" a una serie de televisión por la cadena Ecuavisa.


 Obras
  • Novelas
    • Olga Catalina (1925)
    • Perlita Lila (1925)
    • Los Sangurimas (1934)
    • Los monos enloquecidos (1941) inconclusa por su muerte.
  • Cuentos
    • El amor que dormía (1930)
    • Repisas (1931)
    • Horno (1932)
    • Guashingtón (1938)
  • Ensayo
    • El montubio ecuatoriano (1937)